viernes, 22 de diciembre de 2023

Argentina, un sociedad adicta a las ayudas sociales con síndrome de abstinencia


Seguir el proceso de ajuste y cambio de modelo argentino de Javier Milei es un imperativo. Vas a aprender mucho de política y economía. De adicciones y síndromes de abstinencia en gran escala. 

Es como una clase práctica de laboratorio de micro y macro economía, medicina y psicoterapia para dummies en tiempo real 24/7.

Es  la historia en gestación actuada por los personajes principales en tiempo real.  Una obra ético-político-económica en tiempo real, al alcance de tres clics. 

Porque, sin importar a qué te dediques en la vida, incluso si tienes sólo un carrito de emoliente o una mini bodega como negocio, o de qué país eres, el proceso te va a tocar.

A diferencia del ajuste y cambio de modelo económico que hizo el gobierno de Fujimori en el Perú en los 90, cuando NO fluía la información en tiempo real como ahora, el de Milei se hace a vista y oídos del mundo entero. 

La campaña de Milei tuvo tres rasgos principales: fue directa, se llamó pan al pan y al vino, vino;  fue a través de las redes sociales virtuales; y fue didáctica, Milei pegó en el elector porque fue didáctico, explicando con frases y metáforas simples y contundentes problemas económicos complejos. 

Aquí seis de las frases o ideas más didácticas e impactantes:

1) La inflación es, en realidad, un impuesto ciego e inmoral que afecta más al más pobre. 
2) La inflación es una estafa  por que pone en el mercado medios de pago que no valen lo que dicen que valen, es decir que si hoy compran un kilo de carne, mañana sólo podrás adquirir 100 gramos, por ejemplo.
3) La inflación es un robo de nuestro esfuerzo porque le quita valor al dinero que tengo ahorrado. 
4) La causa de la inflación no es el negociante que sube el precio porque necesita tener un margen mínimo de utilidad, sino el déficit que genera el gasto político y proselitista, el exceso de aparato estatal y la emisión inorgánica de billetes. Hay que atacar la causa no las consecuencias.
5) Si tienes un negocio y tu negocio depende de permisos innecesarios y funcionarios que dan estos permisos, te equivocas, no tienes un negocio. Son los funcionarios los que tienen un negocio.
6) No me opongo al deseo marxista de que los trabajadores de las empresas publicas de ser dueños de los medios de producción.  Por el contrario, los apoyo y les regalo la compañía a ellos que son los "expertos". Pero eso sí, no pueden pedir un centavo al Estado. No hay nada que temer, "siendo expertos", seguro podrán hacer rentable y competitiva a la compañía.

He mencionado seis, pero hay una séptima: en 70 años o más los políticos han convencido a hombres y mujeres argentinos que son unos incapaces para valerse por sí mismos y crear su propia riqueza. 

70 años de subsiadicción y viene el medico y corta el suministro. Para salvar al cuerpo, al todo, al país. Porque, si no lo hace , lo que se viene será mucho peor.

Se desata entonces una férrea oposición animada por la llamada "casta política", los sindicatos y las redes clientelares por lo cual, atención,  el ajuste fiscal y el cambio de modelo económico es, al mismo tiempo, una modificación del modelo político. Y la casta lo sabe.

Las medidas de Milei buscan quitarle al Estado burocrático el poder que tiene sobre los productores y consumidores y darles a estos mucha más libertad. La llamada casta busca mantener las cadenas de sujeción sobre los productores, mantener la vigencia de un modelo  en quiebra moral. Su receta de clientelismo en lo político y asistencialismo en lo económico es un cáncer para Argentina.

Dicen unos: el país necesita un cambio, un viraje de timón, hacia la derecha. en economía y al centro liberal en lo político. Liberalismo político en lugar de clientelismo. Liberalismo económico en lugar de asistencialismo. Dicen otros: el país necesita más Estado y planes sociales.

La sociedad argentina es un adicto a la caridad del Estado y su proveedor es la izquierda política que gobierna. Los sindicatos e intermediarios de obras sociales son los minoristas, los paqueteros. Y ahora, piqueteros.

Sociedad frágil, endeble y debilitada cuando podría ser un gigante sano, fuerte y poderoso.  Las protestas son el síndrome de abstinencia que, o las superan, o los mata. 

 ¿En qué terminará esto? No lo sabemos, lo iremos viendo, pero esperemos que bien para los hermanos argentinos. Y el tuyo, porque el éxito o fracaso del plan de Milei influenciará al elector de todos los países sudamericanos. 

Definirá la fuerza electoral de la izquierda y derecha en el Perú el 2026. Condenará o salvará a Venezuela. Empoderará o debilitará a Bolivia. Y así.